Reflexion.

Cuando algo no me sale bien me dan berrinches, igual que cuando era pequeña y no me compraban una muñeca medio calva en la tienda de veinte duros.Es algo que no puedo evitar, porque sigo sin entender por qué no siempre salen las cosas como yo quiero.
Imagino que es parte de la vida, que no todo tiene por qué salirte bien siempre, que a veces los errores también son aciertos y que hay que conformarse con la suerte que te toque, que si hoy algo no te va bien, mañana puede que todo se solucione o que venga algo mucho mejor.